Internet en el enchufe de corriente eléctrica

Como muchos recordarán el PLC, Power Line Communications o redes de comunicaciones través de las líneas eléctricas, parecía hace un par de años la alternativa a los sistemas de ADSL y Cable para poder llevar conexión a Internet a cualquier sitio de España. La realidad es que al final no ha sido así, y las eléctricas han dejado de dar el servicio. Puedes leer la noticia sobre el cese del servicio de Endesa en este enlace y el de Iberdrola en este otro. Sin embargo la compañía eléctrica Union Fenosa nunca confío en esta Tecnología. Diferentes motivos y problemas han desechado la actual tecnología para la distribución como redes de banda ancha. Uno de los principales problemas eran las interferencias de radio que causaban este tipo de líneas, más información al respecto en este sitio. De momento, aparte de algún pequeño operador que continua dando servicio, lo que hay en marcha para el futuro es el proyecto Europeo Opera, Open PLC European Research Alliance, para redes de comunicaciones de banda ancha. Este proyecto está liderado por dos empresas españolas, Iberdrola y NS2, con la pretensión de ofrecer hasta 200 Mbps y competir con la anuciada VDSL. NS2 es una empresa de tecnología ubicada en Valencia.

En realidad de lo que quería hablar no era del concepto de PLC como red de operador de comunicaciones, sino de algo más simple que es la aplicación en el interior de edificios o en casa. Por lo general está muy extendido el uso de sistemas de red inalámbricos Wi-Fi para conectarse en el hogar y en las empresas. El problema de la tecnología Wi-Fi es que se basa en señales de radio que tienen una área de cobertura limitada, y que se reduce drásticamente dependiendo de los obstáculos entre el punto de acceso y el ordenador.

HomePlug es un estándar de PLC que permite utilizar las instalaciones eléctricas existentes para transmitir datos a una velocidad de 14 Mbps, 85 Mbps o hasta 200 Mbps. Los enchufes se convierten en las conexiones de red, lo que permite ubicar un PC casi en todos los sitios en donde haya un enchufe de corriente. Ideal como tecnología que elimina las barreras que el sistema inalámbrico Wi-Fi no superaba, como por ejemplo muros de hormigón. Los datos viajan a través del cable con una encriptación de 56-bit DES, 128 bits AES, etc. dependiendo del fabricante y modelo. Es muy fácil de instalar, y puede dar conexión a Internet a toda una casa u oficina . Permite una distancia hasta 90 - 200 metros entre nodos, y la frecuencia de trabajo de esta tecnología va desde 4.3MHz hasta los 20.9MHz.

De cara al usuario el sistema es muy simple y transparente: se sustituye el cable de red por el enchufe de corriente eléctrica. Existen modelos con salida USB o Ethernet, dependiendo del modelo y aplicación. En el caso del USB implica la instalación de un controlador en el ordenador para que dispositivo funcione como un adaptador de red. Soporta además la gestión de los dispositivos mediante mediante software y la creación redes seguras mediante encriptación. Por lo general el sistema cuenta con la ventaja de que el interruptor diferencial de la instalación eléctrica funciona como firewall al bloquear las frecuencias más altas que transportan los datos. Existen estándares similares que se utilizan para dar un servicio más amplio con cobertura en edificios, hoteles, etc. La empresa NS2 desarrolla chips para esta tecnología.

Como referencias pueden consultar los productos de la marcas SMC, Ovislink o Delovo. El coste es ligeramente superior a la tecnología Wi-Fi, pero en muchos casos aporta ventajas adicionales. Es una solución muy limpia en cuanto no requiere instalación, y puede dar cobertura a zonas más amplias. Espero que esta opción les aporte soluciones, y serán bienvenidos los comentarios al respecto.